DE BICHO A FULLER

Todo se relaciona, un pensamiento lleva a otro pensamiento, una imagen a otra imagen, un recuerdo a otro recuerdo, y no solo la relación es entre conceptos de similares características, también se relacionan imagenes con recuerdos, frases con personas, objetos con proyectos, y se genera una red donde ya nada aparece aislado, lineas, libros, recuerdos, ideas, listas, proyectos, futuro, pasado, lugares, personas, perfumes, recuerdos, fotos... todo se relaciona con todo y es difícil encontrar el hilo conductor, la trama ordenada, la secuencia lineal.

Creo que constantemente estoy buscando ese hilo que relaciona lo que me interesa, y así surgen listas, anotaciones y palabras que intentan relacionar lo que me gusta, no para ordenar el caos... sino para no olvidarlo.

Domingo de sol en el quintal, café y rayuela, queriendo guardar unas maderas que quedaron de una fiesta, sostenidas por un hilo de pescar (que ahora cuelga con muchas bolas coloridas de papel en mi cuarto), descubrí un insecto, que parecía una oruga queriendo ser mariposa (creo que no lo es, ahora me acuerdo que las orugas son distintas).

Muchas fotos intentando darle foco al objetivo, y registrar el paso de bicho a mariposa.

Dos días después seguía casi igual, el bicho se había movido pero los hilos no.
Nuevo registro del objetivo, mas algunas charlas pertinentes al tema con Mum casi dormido y Adriana con una escoba en mano.

Y de ahí surge Historia 3, "Ciudades Utópicas", trabajo final con el que me recibí. Y un tal Buckminster Fuller, una de las tantas personas interesantes de las que me gustaría saber siempre más. Fuller y su cúpula geodésica, todo eso llegó por la forma de los hilos de la supuesta futura mariposa.

Donde encontrar fotos o información para contarles mas de Fuller? Caí en uno de los blogs que me gustan, y que en el momento de mucha lectura para encontrar verdaderas utopías me dio siempre la información necesaria.

Fuller.. Fuller... Fuller... y de repente un texto que me gusto mucho en el que se relacionan conceptos siempre presente en mi cabeza, arquitectura, ciudad, hombre, interior, exterior, capas, limites, distintas escalas, ventanas, puertas, y siempre hablando de lo mismo, los hilos que cubren ese bicho que encontré en el quintal un domingo de sol, café y rayuela.

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LA CÚPULA SOBRE MANHATTAM DE FULLER O EL SUITALOON DE WEBB

(entre paisajistas y sastres)

La arquitectura se desenvuelve en la delgada línea que divide interior de exterior, que genera unas condiciones ambientales adecuadas para la SUPER-vivencia del hombre. Los extremos de esta línea se encuentran entre la escala Global y nuestro Cuerpo. La escala Global se identifica con la generación de un clima Total, como sugiere Richard Buckminster Fuller en su cúpula sobre Manhattan [1960] de dos millas de diámetro, generando una calefacción natural y protegiendo de la nieve o la lluvia a la ciudad. Otra experiencia similar es la NonStop city [1970] de los italianos Archizoom, dónde se define un espacio homogéneo, climatizado e ilimitado, sin relación con el exterior dónde el individuo se desarrolla en un clima de total igualdad. En el polo opuesto se encontraría el Suitaloon [1968] en el que Michael Webb determina un traje que regula el ambiente interior del cuerpo, alimenta y limpia a su ocupante. En la misma línea podrían aparecer los trajes espaciales (que ajustan las condiciones del astronauta a los del espacio exterior) o los de superhéroe, que además de proporcionar un adecuado bienestar corporal, aumentan las capacidades motoras, auditivas… de su portador. Otro ejemplo menos supremo sería el de las mascarillas que los ciclistas utilizan en las ciudades para filtrar la polución o las máscaras de gas de los nazis retirando cuerpos gaseados. Entre ambos extremos, se encuentra cualquier otra manifestación arquitectónica, los muros, las ventanas, los techos que cualquiera de estas dos opciones anularían. En un ambiente total climatizado y protegido, los hombres saldrían de sus cuevas, de sus casas y sólo nos quedaría configurar ese paisaje resultante. Si nos enfundamos un traje especial acondicionado que controlara nuestra capacidad de movimiento (convertirnos en una especie de Iron Man, Robocop o un Power Ranger, cuyos vecinos cercanos podrían considerarse los tanques en tiempos de guerra ya obsoletos), el arquitecto se convertiría en el confeccionador de esos trajes especiales. Pero ya existen paisajistas y sastres. Pero ya existen arquitectos. Los arquitectos seríamos programadores de eventos, o filósofos, o políticos, o camareros…

Pero parece que no queremos…

Por eso nos empeñamos en continuar haciendo nuestras puertas, ventanas o techos… A permanecer situados entre los dos extremos, entre Fuller y Webb…

http://arqueologiadelfuturo.blogspot.com/search/label/fuller





de bicho a Vicho... ahi empieza otra historia!